“Lo viejo funciona, Juan”

Con el auge de la historieta y la narrativa gráfica, en los años 60 y 70 la industria editorial argentina vivía un momento brillante con tiradas de 10.000 ejemplares.  En “La Vigil” se llegaron a imprimir más de 3 millones de libros con su sello editorial distribuidos en 92 títulos y 16 colecciones.

Por entonces, en Argentina se leían 3 libros por habitante, por año y se manejaba un vocabulario de 5000 palabras. En la Vigil, llegaron a registrarse 1200 consultas diarias en la biblioteca.

La dictadura arrasó con todo eso: desaparecieron autores, editores, libros y palabras para pensar e imaginar. Para 1980, la lectura apenas llegaba a 1 libro por persona y el bagaje lingüístico cayó a 1500 palabras.

Las construcciones de este tipo no se hacen por algún iluminado. Lo que funcionó acá, funcionó por la participación de la gente dijo Raúl Frutos. Nadie se salva solo.

▬ El recorrido guiado también es una lectura del pasado y del presente. Por eso lxs esperamos el sábado 24 de mayo, a las 10h en Alem 3078.